Dime qué encimera tienes y te diré cómo cuidarla

Algunas personas caen en el error de tratar a todas las encimeras por igual y no utilizan los productos adecuados para su limpieza. Te contamos cómo mantener en perfectas condiciones los diferentes tipos de encimeras:

Acero inoxidable
Es un tipo de encimera sensible a los productos abrasivos, por lo que es recomendable utilizar un trapo suave y un detergente neutro. En el caso de tener suciedad incrustada, usa unas gotas de aceite. De esta forma además le devolverás su brillo natural.

Mármol
A pesar de su robustez, el mármol es un material poroso y hay que tratarlo con delicadeza. Su punto más débil es el ácido. Por ello, deberás evitar el contacto con productos como el limón o vinagre, y usar un jabón neutro para su limpieza.

Madera
A las encimeras de madera conviene hacerles un tratamiento periódico para atenuar su porosidad. Para ello, aplica cada dos o tres meses un aceite que la hidrate y tape los poros. Procura no apoyar sobre ella recipientes calientes, ya que pueden provocarle quemaduras.

Corian
Una de las ventajas del corian es que es un material muy resistente. Para mantenerlo limpio, podrás usar un jabón líquido ligeramente abrasivo aplicado con un paño mojado. Un consejo: frota siempre en movimientos circulares.

Granito
Si tu encimera es de este material, y tiene alguna mancha de grasa a la que le cueste irse, aplica una mezcla de agua y bicarbonato. Deja que actúe durante 48 horas y limpia la mezcla con un paño suave.

Silestone
El silestone es un material sintético sin porosidad, así que su limpieza es sencilla. Basta con usar agua y detergente con PH neutro. Procura no usar lejía, ya que podría hacerle perder brillo a la encimera.